Hoy quiero hablaros de mi mejor amiga. Quizá yo no soy su mejor amiga, quizá ella no lo sepa, pero así es. Ella me ha demostrado que puedo confiar en ella siempre, que con ella no hay momentos tristes, que cada momento es una carcajada. Ella es la persona que más me hace reír, que me saca una sonrisa en cualquier momento del día, que aunque sean las 8 de la mañana, nunca es demasiado pronto para sacar el buen humor. Me ha enseñado a disfrutar de la vida, a no conformarme, a superarme a mi misma, me ha enseñado a quererme como soy y a ser mejor. Ella es una de las pocas personas a las que quiero un montón, pero exagerado. Ella y yo somos diferentes en muchísimas cosas, pero eso no impide que sea mi mejor amiga. Nuestros momentos son únicos e inigualables y cada día que paso con ella es diferente y mejor.
Te quiero mucho es poco.
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